Este martes 19 de marzo se cumplieron dos años de la desaparición del exfutbolista profesionaly destacado seleccionado nacional, Marco Opazo Castillo, quien fuera visto por última vez en la comuna de Lampa, en la región Metropolitana.
La familia de Opazo sostiene que las investigaciones han sido realmente pobres, pues tras un inicio lento, han sido muchos los protocolos, pero pocas las pericias y pistas sobre su paradero.
De hecho, indican que uno de los pocos hallazgos, fue gracias a un amigo del desaparecido.
Debido a esta situación, Ximena Opazo, hermana del futbolista, cuestiona cómo a dos años, aún no existe un hilo conductor que les permita descubrir qué pasó con Marco.
“Han sido dos años con más preguntas que respuestas, dos años de muchas falencias en la investigación, muchos errores, con muchas diligencias mal hechas, mal realizadas, y con muchas pericias que a la fecha no se han realizado”.
“Una investigación que partió mal de un principio, una investigación que no ha sido escuchada, que no ha dado resultado. No comprendo como en este país se normaliza tanto los secuestros”.
Dos años de búsqueda
En vista de la gran cantidad de tiempo, Ximena Opazo, está convencida que su hermano se encuentra sin vida y que hay terceras personas involucradas en su desaparición.
Asimismo, comenta que en el transcurso de estas diligencias, viven mucha incertidumbre cuando las policías informan el hallazgo de osamentas humanas que pudieran corresponder con su ADN.
“Cada vez que te informan que hay una osamenta, el corazón se te desgarra, vuelves a caer al piso, te tienes que volver a levantar para enfrentar, para volver a tener esa paz mental, de saber que hiciste todo para encontrar a tu hermano y darle una sepultura”.
Pese a todos los problemas durante las diligencias, la familia espera que tras el cambio del fiscal a cargo de la investigación, no solo comiencen a aparecer los primeros resultados, sino que escuchen sus demandas y que realicen todas las pericias que a lo largo este tiempo no se han llevado a cabo.